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Reflexiones escritor en Islandia

Reflexiones escritor en Islandia es un artículo de Jordi Pujolà.

Una gasolinera sin techo en la noche solitaria y las luces fugaces de la carretera. Llega el invierno.

Para empezar, mira todo lo que puedes hacer en Islandia.

Un barrio pijo

Aparentemente la mayoría de amigos de mi hijo de once años son ricos o tienen mucho dinero a juzgar por las casas y los coches aparcados en frente que vamos pasando. Nosotros vivimos en la zona de arriba, en la que hay algunos bloques; no nos podemos quejar, pues nuestro piso goza de unas vistas fantásticas. No obstante, a medida que bajas al valle, todo son chalets, la mayoría tienen jacuzzy exterior y otras excentricidades.

Reflexiones escritor Jordi Pujolða
Me gusta ir a la montaña. F. Inga Guðjónsdóttir

Una tartana de coche

Nuestro coche, es un SUV de tercera mano que funciona fenomenal, pero que comparado con los Tesla, Mercedes y Range Rover que hay frente a los jardines recortados parece una tartana. Hacemos este recorrido porque vamos a buscar a dos de sus amigos de la escuela. Quieren que los lleve a La Perla a cazar un Pokemon. Yo por supuesto solo soy el chófer. Los dejo sobre el terreno y me avisan cuando han acabado, intento aprovechar el tiempo mientras tanto. Aunque me consta que hay adultos que también se unen al grupo, mi hijo dice que hay un hombre de 70 años que siempre acude con tres teléfonos. Me viene a la cabeza la película Caza-fantasmas.

Reflexiones

¿A qué viene toda este sermón?

Islandia Thorsmork
Reflexiones la naturaleza me inspira. F. Torben Bridges

Mientras conducía por el barrio rico, pensaba que los padres de los amigos de mi hijo no son mejores padres que yo u otros padres que tenemos menos. Yo, particularmente, creo que una vez que tienes un coche, una casa y cierto dinero para gastar, intentar conseguir más dinero no hace más que complicarte la vida (trabajar, endeudarte, cargarte de tensión…).

El dinero

Alguna vez mis hijos nos piden una casa más grande (dos baños, una habitación doble, jaccuzzy, jardín con esas camas elásticas que están tan de moda en Islandia y llaman trampolin…) y yo les digo que calma, que algún día la tendremos (no sé si con tantos lujos), no estoy en contra del progreso, siempre que sea un proceso natural, sin condenarse a pagar una súper hipoteca de por vida. Sin embargo, también les explico que lo importante de esas casas, de esos coches, son las personas que están dentro. Las cosas materiales se pueden comprar y vender, pero las personas somos irreemplazables.

Reflexiones, pensar como los niños

Mientras conduzco, miro a los niños y van felices dentro del KIA de tercera mano, pongo una canción que les gusta y subo el volumen; si van comiendo helado y se les derrama un poco en la tapicería, no pasa nada. A ellos lo que les interesa es que algún adulto los lleve a la Perla y puedan cazar ese Pokemon que andan buscando, el coche es solo la máquina.

Perderse en las montañas
Reflexiones: en las montañas. F. Torben Bridges

El cielo en Islandia es perturbador

Muchas veces miro el cielo, aquí en Islandia es inmenso, y siempre me digo que me estoy esforzando mucho por cumplir mis sueños. Todavía no me gano la vida plenamente con la literatura, pero soy feliz haciendo lo que quiero y todo llegará. En la vida, lo más importante es tener salud y unos sueños que te permitan levantarte por las mañanas con ilusión. Mucha gente me criticó cuando me largué de Barcelona y dejé mi puesto de ejecutivo en la inmobiliaria. Algún naysayer (aguafiestas) me dijo que, cuando maduras, los sueños de juventud se evaporan. ¡Pues tengo 45 y los míos siguen intactos!

Un trabajador

Yo no tengo complejos en vestir la ropa del trabajo, siempre combino otros oficios con la escritura; en la actualidad estoy alquilando coches a los turistas; pero os aseguro que a mis hijos no les importa verme con la camisa blanca y la corbata roja. No se avergüenzan de mí, corren a mi encuentro y me abrazan. Lo cual me hace pensar que valgo como padre, aunque no sea rico. No obstante, tener dinero no es nada malo. Hay padres ricos estupendos que dedican mucho tiempo a su familia. Lo único malo del dinero es cuando se gasta por encima de nuestras posibilidades.

Reflexión más profunda

Sin embargo, mi reflexión va más lejos. Yo soy un privilegiado, tengo las necesidades cubiertas, puedo viajar, ir a un restaurante… No obstante, los refugiados, esa gente de color que llega de otros países, no tienen nada. De forma instintiva, los miramos mal, como si fueran invasores. Mucha gente los rechaza sin saber nada de ellos. A pesar de todo, son familias. ¿Es qué el padre de esa familia marroquí es menos que yo? ¿Qué pensará él cuando los miramos por encima del hombro, muchas veces con desprecio, desde nuestra casas con calefacción y nuestros coches con tracción en las cuatro ruedas?

Reflexiones gasolinera Islandia
Reflexiones una gasolinera solitaria sin techo por la noche

Reflexiones: los refugiados

Los refugiados son personas a las que la maquinaria capitalista ha saqueado en sus países y se han quedado sin hogar. Todos los políticos desean la paz a en el mundo, acabar con las injusticias… pero sus países (las empresas que les pagan) no paran de fabricar armas y venderlas al mejor postor. A veces, es como si estuviésemos viendo una película o unos anuncios, sabemos que todo es ficticio o mentira, pero nos sumergimos en ellos y los asimilamos.

Escribo en esta vida porque siempre estoy pensando en todo lo que veo y me afecta. Esta es una medicina que me aplico para no olvidarme, para intentar mejorar, no ser tan egoísta. Supongo que soy tan mezquino como cualquiera. No estoy intentando dar una lección de moral a nadie. Lo hago para mí y si a alguien también, de paso, le puede ayudar, que se suba al carro.

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Depende del lado que se mire.

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